La delegación ucraniana desplazada a Ginebra para discutir con el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, la propuesta de paz impulsada por el presidente Donald Trump, mantuvo este domingo una ronda preliminar de contactos con asesores de seguridad de Reino Unido, Francia y Alemania.

Andri Yermak, jefe del gabinete del presidente Volodímir Zelenski y líder del equipo negociador, informó a través de su cuenta de Telegram que se celebró una primera reunión con los asesores Jonathan Powell (Reino Unido), Emmanuel Bonne (Francia) y Günter Sautter (Alemania). El encuentro formó parte de los preparativos diplomáticos antes de la cita con el jefe de la diplomacia estadounidense.

La conversación formal con Rubio está prevista en la sede de la Misión de Estados Unidos ante la ONU en Ginebra, con el plan de paz de 28 puntos sobre la mesa. Según lo adelantado, Rubio estará acompañado por el enviado especial para misiones de paz, Steve Witkoff, y el secretario del Ejército estadounidense, Dan Driscoll.

Yermak aseguró que Washington ha mostrado un “enfoque constructivo” y adelantó que la jornada incluye “reuniones en diferentes formatos” con el objetivo de avanzar hacia “una paz duradera y justa para Ucrania”.

La presión temporal marca el ritmo de las conversaciones: Trump dio a Zelenski un plazo de una semana hasta el jueves 27 de noviembre para aceptar la propuesta presentada por sorpresa el día 20. Aunque el mandatario estadounidense subrayó que no se trata de la “última oferta”, varios de los puntos han generado fuerte rechazo en Kiev.

Entre las disposiciones más controvertidas figuran la cesión del Donbás a Rusia, el reconocimiento de Crimea como territorio ruso y una reducción significativa del tamaño de las Fuerzas Armadas ucranianas, que pasarían de 900.000 a 600.000 efectivos. Para el Gobierno ucraniano, estos elementos equivalen a una capitulación ante Moscú y contradicen su posición de mantener la integridad territorial del país.