Un informe titulado ESET Security Report 2024 reveló que al menos un tercio de las organizaciones empresariales y gubernamentales en América Latina fueron víctimas de ciberataques en 2023.

Elaborado por la firma de ciberseguridad ESET, el estudio destaca la vulnerabilidad de varios sectores, con un enfoque particular en los organismos de gobierno, la tecnología y el sector bancario, que lideran la lista de las industrias más afectadas.

El reporte se basa en encuestas realizadas a dos mil 141 profesionales de tecnología de la información y seguridad en más de 10 países latinoamericanos, incluyendo México.

De las empresas que aseguraron no haber sufrido incidentes de seguridad en el último año, una de cada cinco admitió no contar con la tecnología para detectar tales eventos. Lo que sugiere que muchos podrían haber estado bajo ataque sin siquiera darse cuenta.

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Los efectos de los ciberataques se extienden más allá de lo técnico, afectando de manera significativa la economía y las operaciones de las organizaciones.

El estudio revela que el 23 % de las empresas en la región fue blanco de al menos un intento de ataque de ransomware en los últimos dos años.

A pesar de las tensiones que esos ataques pueden generar, el 86 % de las organizaciones se niega a negociar el pago de un rescate. Sin embargo, 14 % podría considerar esa opción, a pesar de que hacerlo no garantiza la recuperación de datos ni la protección contra la publicación de información sensible.

El informe también señala que un desafío en la lucha contra los ciberataques es la percepción de subfinanciamiento en ciberseguridad, con 62 % de las organizaciones que reconoce que su presupuesto para ciberseguridad resulta insuficiente para enfrentar las amenazas actuales.