Un nuevo giro pone en duda la versión oficial sobre la muerte de Jeffrey Epstein. El video de vigilancia divulgado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que supuestamente demostraría que el financista no recibió visitas en su celda la noche en que murió, presenta evidencias de edición y una inexplicable pérdida de un minuto de grabación.

Así lo confirmó una investigación publicada este 11 de julio de 2025 por el portal especializado WIRED.

El archivo, de casi 11 horas, fue publicado como “completamente sin editar”, pero peritos forenses consultados por WIRED detectaron al menos cuatro manipulaciones mediante el programa Adobe Premiere Pro.

Además, los metadatos revelan que fue armado a partir de dos clips distintos antes de ser exportado y difundido.

La fiscal general Pam Bondi atribuyó la omisión de un minuto a una “falla técnica” de una grabadora antigua, pero no ofreció pruebas concluyentes.

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El caso revive el debate sobre la transparencia institucional y la cadena de custodia de evidencias clave.

Hany Farid, profesor de análisis forense digital en la Universidad de California en Berkeley, afirmó que el video, tal como fue presentado, no sería admisible en un tribunal. La edición y ausencia de respaldo técnico oficial refuerzan la desconfianza sobre la versión oficial del presunto suicidio.

A esto se suma el deficiente estado del sistema de videovigilancia del Centro Correccional Metropolitano de Nueva York. Según un informe del Departamento de Justicia, más de la mitad de sus cámaras dejaron de funcionar desde el 29 de julio de 2019.

La noche del 9 de agosto, día previo al hallazgo del cuerpo, no pudieron ser reparadas por falta de personal disponible, dejando activos solo dos dispositivos sin vista directa a la celda de Epstein.