Ante la creciente crisis hídrica que enfrenta la cuenca del lago de Pátzcuaro, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado implementó una estrategia de vigilancia aérea y acuática para frenar el robo de agua en esta zona emblemática de Michoacán.

Mediante el uso de drones de vigilancia y patrullajes lacustres, elementos de la Guardia Civil, en coordinación con policías municipales de Pátzcuaro, Erongarícuaro, Quiroga y Tzintzuntzan, monitorean de forma permanente los puntos críticos del lago para detectar la instalación clandestina de mangueras, bombas o cualquier mecanismo destinado a extraer agua sin autorización.

El despliegue tecnológico permite a las autoridades tener cobertura en tiempo real sobre cuerpos de agua estratégicos como los muelles General II, Puácuaro, Chupícuaro y Ucazanaztacua, así como zonas de manantiales como Urandén, Ojo de Agua y Oponguio. También se mantienen rondines a pie y patrullajes terrestres para disuadir la sustracción irregular del líquido.

La situación hídrica del lago ha sido motivo de alerta en los últimos años, con descensos visibles en el nivel del agua y afectaciones a la biodiversidad, el turismo y la pesca local. La sobreexplotación, el cambio climático y la falta de regulación en el uso del agua han contribuido al deterioro de este ecosistema.

La SSP exhortó a la ciudadanía a colaborar en la preservación del lago y denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con la extracción ilegal de agua a través de las líneas 911 de emergencias y 089 de denuncia anónima.