El director técnico del Barcelona, Xavi Hernández, cambió de opinión y decidió continuar en su cargo debido a la confianza y el apoyo recibido, tanto del club como de los jugadores.

Xavi aseguró que notó “una confianza muy grande del club y la complicidad y el apoyo de los jugadores”. Asimismo, dejó claro que no tomará la decisión de irse por sí solo en el futuro, a menos que sea el club quien le pida rescindir el contrato.

El entrenador catalán expresó que siente “de corazón” que el proyecto no ha llegado a su fin y que está dispuesto a darlo todo.

“Vamos a darlo todo. Tengo claro que seguirá siendo desagradable y cruel, con situaciones de críticas. Pero me veo con energía y fuerzas para seguir con este proyecto”, afirmó.

Xavi admitió que cuando anunció su intención de dejar el banquillo a final de temporada en enero de 2024, creía que era lo mejor para el club; sin embargo, tras recibir el apoyo de la plantilla y reflexionar, ha cambiado de parecer.

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“Quizá la decisión de irme fuera equivocada, ahora siento todo lo contrario, que el proyecto no ha terminado, que necesitamos estabilidad. La gente joven que ha debutado cree en nosotros, toda la plantilla me ha dado su apoyo”, explicó.

La dinámica positiva del final de la temporada también influyó en su decisión de quedarse. “Miraremos de reforzarnos lo mejor posible para el año que viene y a luchar y a conseguir lo mejor para el club. No he puesto ninguna condición”, aseguró con relación a los posibles fichajes.

Finalmente, Xavi aclaró que su decisión no se basa en motivos económicos, sino en su creencia en el proyecto y la confianza en alcanzar el éxito.

“Mi sensación al llegar al club era de que al equipo no le llegaba para competir ante los grandes, para ir a campos como el del Bayern. Ahora, pienso que se nos ha escapado la Champions por detalles (…) El año que viene lo intentaremos, tengo ganas de seguir compitiendo”, concluyó.