En una jornada histórica para México, Claudia Sheinbaum asumió hoy oficialmente la presidencia constitucional del país, convirtiéndose así en la primera mujer en ocupar ese alto cargo.

En este contexto, la excandidata presidencial por el PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez Ruiz, hizo pública una carta dirigida a la nueva presidenta, entre deseos de buena suerte y críticas a la administración anterior.

En la misiva, Gálvez expresa su deseo de que Sheinbaum “gobierne con la verdad” y que termine con lo que califica como “la dieta cotidiana de mentiras y las conferencias que propagan el odio y la división entre los mexicanos”.

Su mensaje, de dos páginas y fechado el mismo día de la toma de protesta, destaca la importancia de que las mujeres en el poder demuestren un estilo de gobernanza diferente, libre de las influencias masculinas que, según ella, han prevalecido.

Te puede interesar:  No regresará la guerra contra el narco de Calderón, asegura Sheinbaum

“Mujeres gobernamos de manera diferente sin que ningún hombre nos mande”, subraya en su carta, mientras envía a Sheinbaum sus mejores deseos, señalando que su éxito también repercutirá en el bienestar del país.

“Deseo que Dios ilumine tu camino y proteja a todos los mexicanos”, escribe Gálvez, enfatizando en la necesidad de un gobierno centrado en el desarrollo y la justicia social.

Gálvez hace un llamado para que las obras del nuevo sexenio “impulsen el desarrollo” y no sirvan para “pagar favores y facturas de campañas electorales”.

Además, aboga por un enfoque en energías limpias, mejoras en el sistema de salud y la atención a las víctimas de la violencia y los desaparecidos.

El llamado de Gálvez se extiende a la gestión del Poder Judicial, instando a Sheinbaum a escuchar a los trabajadores y trabajar por un sistema de justicia más eficaz y menos corrupto: “Persigue a los corruptos, pero no utilices esta lucha como pretexto para destruir las instituciones que tanto esfuerzo costaron construir”.

Finalmente, Gálvez concluye su misiva con un ruego: “Por favor no heredes ni repitas los odios de tu antecesor. Gobierna para todos, no solo para los tuyos. Dale a tu liderazgo tu propia voz de serenidad e independencia”.