La discriminación daña a las personas, a los equipos, a las empresas y la sociedad en su conjunto, es trabajar en la promoción de la diversidad, la equidad y la inclusión en las organizaciones mexicanas, y reconocer la existencia de actos discriminatorios para abordarlos de manera efectiva.

La Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación en México establece claramente los motivos y formas de discriminación que deben ser evitados en el ámbito laboral y social.

No obstante, los comportamientos discriminatorios están arraigados, se desarrollan desde temprana edad en el hogar y en la escuela, y continúan en el ámbito laboral cuando las personas se convierten en adultos trabajadores.

Si el entorno laboral refuerza esas conductas, se crea un ambiente propicio para perpetuarlas. Entonces,¿cómo podemos eliminar las prácticas discriminatorias que han estado presentes durante décadas?

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Comenzando por el liderazgo de las organizaciones, para combatir la discriminación y promover la diversidad, equidad, inclusión y accesibilidad, es necesario que los líderes de la empresa prioricen este tema en su agenda de negocios.

La lucha contra la discriminación no puede ser opcional en las organizaciones; es un tema regulado y legislado, con consecuencias para aquellos que violan la ley en ese aspecto.

El liderazgo no solo debe dar ejemplo en la prevención de la discriminación, sino que también debe darle la misma importancia estratégica que se le da al control financiero y la prevención del delito en la empresa.

Los comités de diversidad, equidad, inclusión y accesibilidad deben tener un poder auténtico y congruente, no son sólo una apariencia de responsabilidad social, sino que deben ser un vehículo genuino para erradicar la exclusión en todas sus formas.